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ESIxEllas

Afectividad

Al reivindicar y respetar los sentimientos y emociones que nos atraviesan, logramos desarrollar valores de cuidado, empatía, solidaridad y respeto en nuestras relaciones.

Preguntas frecuentes

¿Te suenan las frases “los que más se pelean son los que más se quieren” o “del amor al odio hay un paso”?

El “amor romántico” es una forma de construir el amor a partir de nuestra organización social, económica y política, se construye a través de la ideología de ese momento: actualmente, el capitalismo y el patriarcado. Esto conlleva a que construyamos nuestra forma de amar en base a mitos que perpetúan el machismo en las relaciones, manteniéndose gracias a la concepción de que cuando amás a alguien, ese alguien te pertenece. La idea en torno al sufrimiento y el amor romántico consiste en creer que para conseguir el amor verdadero, hay que sufrir mucho y pasarla muy mal; así, se logra naturalizar la violencia. La dinámica “sumisión - dominación” se hace presente también, donde  una persona domina y la otra es sometida. El amor romántico no nos plantea o propone relacionarnos horizontalmente, de vos a vos, de igual a igual, sino que plantea una relación de poder y desigual

¿Cuál es el reto que tenemos por delante? Se trata de demostrar que otras formas de quererse son posibles; no debemos reproducir los mandatos que nos dicen a quién tenemos que amar, cómo y de qué manera. Sí debemos proponernos que siempre sea en el marco del respeto a le otre y sus decisiones, acompañándonos y velando por la vida de quien elegimos (o no) tener como pareja.

En una relación saludable:

  • cada persona apoya y alienta a la otra;
  • les demás quieren saber lo que estás pensando y sintiendo, y están interesades en lo que tienes para decir;
  • está bien tener desacuerdos, pero es importante hablar con respeto y abiertamente sobre eso con les demás;
  • en todas las relaciones es necesario hablar o conversar para llegar a un acuerdo, pero no debe ser siempre la misma persona quien ceda ante la otra;
  • es importante para ambas personas dar y recibir;

No olvides tratar tus relaciones con cuidado, si une amigue o pareja te hace sentir menos, te provoca o te empuja física o sexualmente a hacer cosas que realmente no querés hacer, entonces esta podría no ser una relación saludable para vos.

A veces, la violencia psicológica es difícil de reconocer y problematizar. Así que, si te dicen cosas que te hacen sentir menos o te angustian y preocupan, sabé que no es normal. La violencia psicológica es violencia, y una señal de alarma a posibles violencias futuras. Recordá que toda relación debería hacerte sentir cómode, bien con vos misme  y con quien sos!

  1. Definimos a la violencia en el noviazgo como todas aquellas maneras de vincularnos con nuestra pareja que implican abuso de poder, manipulación, dominación,  la restricción de sus derechos y cualquier manifestación de violencia hacia le otre, ya sea de forma personal o virtual.
    Este tipo de conductas violentas se presentan de forma cíclica, en un círculo vicioso y suelen estar naturalizadas
    Aparecen de manera sutil en la relación, haciendo que sea una tarea muy difícil darse cuenta. No se dan de un día para el otro, ni se perciben como agresivas o alarmantes ya que se interpretan como pruebas de amor y están enmascaradas en apariencia de cariño y afecto. Se dan en un lento proceso cotidiano, desconociendo el riesgo de continuar con la relación; así, las prácticas de burlas, empujones, y diversas agresiones físicas en un principio leves, pueden ser consideradas por quienes reciben la agresión como parte de la relación amorosa. El miedo aparece como una emoción fundamental en cualquier forma de violencia, ya que facilita el control de la relación.
    Por esto es fundamental aprender a construir formas sanas de relacionarnos, y cómo expresamos nuestros sentimientos y frustraciones.
    No es una cuestión de suerte tener un vínculo amoroso respetuoso, las relaciones de pareja las elegimos y las construimos, por eso es que debemos revisar nuestra parte en ese vínculo, sin justificar por esto ningún tipo de violencia.

 Hablar de qué tipos de vínculos existen va más allá de clasificaciones! Es cierto que existen una gran variedad de relaciones íntimas y sexuales que presentan ciertas características que hacen la diferencia entre otras, pero esas características no siempre son las mismas y no deben ser generalizadas. Todo varía según el acuerdo al que llegue la pareja, sea una relación monógama o no. Las relaciones no tienen límites, no tengas miedo de explorar y experimentar cosas nuevas, tampoco tienen un modelo a seguir; nadie tiene porqué decirte cómo deberías vivir tus relaciones, pero siempre recordando que, para poder mantener un vínculo saludable nunca debe faltar la comunicación, consentimiento y consciencia. Una relación no es de a une, sea sexual o íntima, tené en cuenta también cómo tu acciones pueden afectar a le otre y sus emociones.

  1. Como te contamos anteriormente, las violencias en los noviazgos suelen aparecer de manera sutil al punto de naturalizarlas y pasar desapercibidas.
    Las veces donde una pareja nos cuestiona la vestimenta, nos hace sentir mal con comentarios sobre nuestro cuerpo e incluso con mandatos sobre cómo debemos ser, las presiones sobre las relaciones sexuales,  la violencia sexual y el modo en que me relaciono con otros varones o mujeres nos lesiona el autoestima y no construyen una relación sana. También encontramos la violencia a modo de “chistes” disfrazados de insultos, empujones, pellizcos, zamarreos, intimidación y/o cachetadas. Todas estas  son formas de violencias.
    Veamos algunas frases a modo de ejemplo: 

"¿Cómo te vas a poner eso? andá a cambiarte."
"No tenés tetas."
"¿Para qué vas a estudiar? si no te da la cabeza."
"No uso preservativo, me aprieta, total vos tomas pastillas."
"¿Quién te va a querer? Si sos horrible, solo yo."
"Vos sos mi pareja y no te podes juntar con tal o cual."

Se suele creer que los celos son señales de amor y de cuidado (me cela porque me quiere, porque me cuida, porque está pendiente de mí, porque le importo) pero en realidad los celos son inseguridades que proyectamos en los demás. Tener que saber dónde está alguien, con quién está, qué está haciendo y a quién mira, no son formas de cuidado, sino conductas de control. Queremos controlar a la otra persona y el amor es libertad y respeto.
¡ojo! No está mal sentir celos, es un sentimiento que a todes nos atraviesa en algún momento de nuestras vidas, ya sea con una pareja, une amigue o cualquier otro vínculo. Lo importante es cómo manifiesto este sentimiento, sin hacer cargo al otre de lo que me pasa a mi, sin convertir esa inseguridad en control o posesión. 

Cada persona tiene límites distintos y todes merecen que respeten los suyos. Consentimiento significa estar activamente de acuerdo con realizar algún tipo de actividad de forma consciente. 

Cuando hablamos de consentimiento sexual, nos referimos a estar de acuerdo en participar de una actividad de índole sexual con una o más personas; es la manera de establecer si todas las partes involucradas en la relación sexual lo hacen a gusto, de forma sana y consciente.
Antes de mantener relaciones sexuales con otra persona, debes saber si está de acuerdo. Consentir y pedir consentimiento consiste en establecer tus límites personales y respetar los del otre.
Sin consentimiento, la actividad sexual (incluido el sexo oral, tocar los genitales y la penetración vaginal o anal) es agresión sexual o violación.
Tenes la última palabra sobre lo que pasa con tu cuerpo. No importa si ya lo hicieron o incluso si dijiste que sí antes y luego cambiaste de parecer. Tenes derecho a decir “basta” en cualquier momento.
El consentimiento nunca debe darse por sentado por tu comportamiento anterior, la ropa que lleves o a dónde vayas, siempre se debe comunicar con claridad, no debe haber margen de duda ni misterios. El silencio no es consentimiento.
Combatir el sexo no consentido es acabar con la cultura de la violación.

El consentimiento tiene las siguientes características:

  • Se da libremente. Consentir es una opción que tomas sin presión, sin manipulación o sin la influencia de las drogas o el alcohol.
  • Es entusiasta. Cuando se trata de sexo, debes hacer las cosas que deseas hacer, no lo que se espera que hagas.
  • Es específico. Decir que sí a algo (como ir a besarse al dormitorio) no significa que aceptes hacer otras cosas (como tener relaciones sexuales).
  • Se brinda estando informade. Solo puedes consentir algo si tienes toda la información al respecto. Por ejemplo, si alguien dice que usará un condón y luego no lo hace, no hubo consentimiento.
  • Es reversible. Todos pueden cambiar de parecer sobre lo que desean hacer, en cualquier momento, incluso si ya lo hicieron antes.

No todo lo que dicen es cierto, te dejamos un par de mentiras comunes que debés conocer.

El afecto o amor en igualdad es aquel que no contempla situaciones en donde uno vale más que otro. Para construir afectividades saludables, deberíamos concebirnos como personas completas que no precisan de una “media naranja”, entendiendo al vínculo como una relación de a dos y en igualdad, basándonos en la confianza y no en el control